Segovia es una ciudad que se saborea a cada paso, y no solo por su famoso cochinillo. Aquí, salir de tapas es casi una religión, sobre todo en el casco antiguo, donde cada rincón esconde un bar con historia y una barra llena de tentaciones.
Las zonas más animadas para tapear son la Plaza Mayor y sus soportales, la calle Infanta Isabel, Cronista Lecea y, por supuesto, la zona del Acueducto.
Si te animas a una ruta de tapeo, empieza en la Plaza Mayor y déjate llevar por las calles aledañas: cada consumición viene con su tapa gratuita, y la variedad es infinita.
Desde la tradicional tortilla o la paella, hasta torreznos, croquetas, ensaladillas o cazuelitas de judiones, aquí el tapeo es generoso y el ambiente, inmejorable.
Los 10 mejores bares de tapas y raciones en Segovia
Bar Taberna Rubí
Este pequeño local es un paraíso para los amantes de la cerveza artesanal y las tapas originales. Su ambiente es desenfadado y siempre hay buena música de fondo.
Aquí puedes acompañar tu caña con tapas como croquetas caseras, patatas bravas o incluso alguna sorpresa del día.
Los clientes destacan la calidad de sus cervezas y la amabilidad del personal.
Es perfecto para una parada informal y probar algo diferente a lo habitual en Segovia.
Si eres de los que disfrutan de una buena charla entre amigos y un tapeo sin prisas, este es tu sitio.
Bar Socorro
Muy cerca del Acueducto, el Bar Socorro es conocido por su ambiente tranquilo y sus espectaculares vistas.
Aquí las tapas son generosas y puedes elegir entre varias opciones, como ensaladilla rusa, patatas revolconas o boquerones en vinagre.
El trato es cercano y el local suele estar frecuentado tanto por turistas como por segovianos de toda la vida.
Es ideal para una tarde soleada en su terraza, disfrutando de un vermut y una tapa de las que te dejan con ganas de repetir.
La Diligencia 35
En la parte moderna de Segovia, La Diligencia 35 se ha ganado un hueco entre los imprescindibles gracias a sus tapas creativas y su ambiente familiar.
Aquí puedes elegir tu tapa con cada consumición, y la variedad sorprende: desde callos hasta tostas de solomillo, pasando por croquetas de jamón o pimientos rellenos.
Además, han sido ganadores en varias ediciones de la Ruta de la Tapa de la ciudad, así que la calidad está asegurada.
Un lugar perfecto para tapear a tu ritmo y sentirte como en casa.
Bar Los Tarines
Este bar es todo un clásico entre los jóvenes y quienes buscan un tapeo económico y divertido.
Aquí eliges tu tapa con la bebida, y las croquetas son de las más demandadas.
El ambiente es animado, ideal para grupos y despedidas.
Los precios son ajustados y la relación calidad-cantidad es difícil de superar.
Si buscas un sitio sin pretensiones, pero con tapas sabrosas y ambiente festivo, Los Tarines no falla.
La Concepción (“La Concha”)
En plena Plaza Mayor, La Concepción es uno de esos bares donde siempre hay ambiente y nunca falta una buena tapa de paella, croquetas o tortilla.
El local es amplio, con barra y mesas bajo los soportales, y el trato suele ser rápido y eficiente.
Aquí la tapa viene siempre con la consumición, y aunque no siempre puedes elegirla, la calidad nunca decepciona.
Es uno de los favoritos de los segovianos para el vermut del domingo o para empezar una ruta de tapeo por el centro.
La Taberna de El Fogón
Este bar es famoso por sus tapas premiadas en el Concurso de Tapas de Segovia, donde fusionan la tradición castellana con toques sefardíes.
La barra siempre está llena de pinchos creativos, desde mini hamburguesas hasta cazuelitas de guiso.
El ambiente es acogedor y el servicio rápido, ideal para quienes quieren probar algo diferente y sabroso.
No dejes de preguntar por la tapa ganadora del año, porque suele ser una apuesta segura.
Bar San Miguel
Situado a un paso de la Plaza Mayor, el Bar San Miguel es famoso por su variedad de tapas gratuitas con cada bebida.
Puedes encontrarte desde ensaladilla rusa hasta patatas con bacon o pequeñas raciones de guisos caseros.
El local es sencillo pero siempre animado, y el trato es cercano.
Es habitual ver tanto a turistas como a segovianos disfrutando de una ronda de cañas y tapas en su barra.
Un imprescindible para quienes buscan cantidad y sabor sin complicaciones.
Las Cuevas del Duque
A un paso del Acueducto, este bar histórico lleva abierto desde finales del siglo XIX y es famoso por sus tapas incluidas con la consumición.
El local conserva ese aire de taberna antigua, con paredes de piedra y ambiente cálido.
Aquí puedes probar desde morcilla hasta torreznos, pasando por pimientos rellenos o callos.
Es un lugar perfecto para sentir la historia de Segovia mientras disfrutas de un tapeo auténtico y generoso.
Bar El Sitio
Si preguntas a cualquier segoviano cuál es el mejor bar de tapas de la ciudad, la respuesta más repetida será El Sitio.
Aquí puedes elegir tu tapa con cada consumición, y la variedad es interminable: croquetas, rejos, patatas, torreznos, ensaladilla...
El local es amplio, rústico y siempre está lleno, así que prepárate para disfrutar de un ambiente animado y auténtico.
El precio es ajustado y la calidad, de las mejores de la ciudad. Sin duda, un referente del tapeo segoviano.
Mesón José María
No se puede hablar de tapeo en Segovia sin mencionar el Mesón José María.
Aunque es famoso por su cochinillo, la barra del bar es un espectáculo de tapas gratuitas con cada consumición.
Aquí puedes probar croquetas, pequeñas salchichas, papas revolconas o incluso algún guiso del día.
El ambiente es bullicioso y siempre hay gente, pero merece la pena esperar.
Los vinos de la casa acompañan a la perfección, y el trato es profesional y cercano.
Un clásico que nunca falla y que hay que visitar al menos una vez en la vida.
¿Y tú, cuál añadirías a la lista?
Ahora te toca a ti: ¿has probado alguno de estos bares? ¿Tienes algún favorito secreto que no sale en las guías?
Cuéntamelo en los comentarios y así seguimos ampliando la ruta de tapeo segoviana entre todos.
Y como anécdota, ¿sabías que en Segovia la tapa es casi una obligación con la bebida? Hay bares donde, si no te la ponen, el camarero te pide disculpas como si hubiera olvidado traerte el pan.
Así es el arte del tapeo en esta ciudad, donde cada ronda es una pequeña fiesta.
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